La resolución recibió una mayoría de dos tercios de los votantes, menos abstenciones, en la Asamblea de 193 miembros, con 93 naciones votando a favor y 24 en contra.
Cincuenta y ocho se abstuvieron del proceso.
Rusia, China, Cuba, Corea del Norte, Irán, Siria, Vietnam, estuvieron entre los que votaron en contra.
Los que se abstuvieron incluyeron India, Brasil, Sudáfrica, México, Egipto, Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos, Jordania, Qatar, Kuwait, Irak, Pakistán, Singapur, Tailandia, Malasia, Indonesia y Camboya.
La reunión marcó la reanudación de una sesión especial de emergencia sobre la guerra en Ucrania y siguió a los informes de violaciones cometidas por las fuerzas rusas.
El fin de semana pasado, surgieron fotos inquietantes de la ciudad de Bucha, un suburbio de la capital, Kiev, donde se encontraron cientos de cuerpos de civiles en las calles y en fosas comunes luego de la retirada de Rusia del área.
Antes de la votación, el embajador de Ucrania, Sergiy Kyslytsya, instó a los países a apoyar la resolución.
“Bucha y docenas de otras ciudades y pueblos ucranianos, donde miles de residentes pacíficos han sido asesinados, torturados, violados, secuestrados y robados por el ejército ruso, sirven como ejemplo de cuán dramáticamente ha ido la Federación Rusa desde sus declaraciones iniciales en el dominio de los derechos humanos. Por eso este caso es único y la respuesta de hoy es obvia y se explica por sí misma”, dijo.
Esta no es la primera vez que un Estado miembro ha tenido su membresía en la Consejo de Derechos Humanos suspendido. Libia perdió su escaño en 2011, luego de la represión de las protestas por parte del gobernante Muammar Gaddafi, quien luego fue derrocado.
Gennady Kuzmin, embajador adjunto de Rusia, en declaraciones antes de la votación, pidió a los países que “voten en contra del intento de los países occidentales y sus aliados de destruir la arquitectura de derechos humanos existente”.
Paralelos con Ruanda
La votación tuvo lugar en el aniversario del genocidio de 1994 en Ruanda, y el embajador ucraniano trazó paralelismos con esta página oscura de la historia reciente.
“El genocidio en Ruanda se debió en gran medida a la indiferencia de la comunidad mundial, cuando la ONU no respondió a las advertencias en la ONU Consejo de Seguridad y en la Asamblea General, un año antes de la tragedia que conmemoramos exactamente en este día”, dijo el Sr. Kyslytsya.
“Hoy, en el caso de Ucrania, no es ni siquiera un año, porque la tragedia se está desarrollando ahora mismo ante nuestros ojos”.
El Consejo de Derechos Humanos de la ONU consta de 47 miembros y tiene su sede en Ginebra.
Rusia se unió al organismo en enero de 2021 como uno de los 15 países elegidos por la Asamblea General para cumplir mandatos de tres años.
Según la resolución de 2006 que estableció el Consejo, la Asamblea General puede suspender a un país como miembro si comete violaciones graves y sistemáticas de los derechos humanos.
Rusia abandona el Consejo
Hablando después de la adopción de la resolución, el Representante Permanente Adjunto Kuzmin, declaró repentinamente que Rusia ya había decidido ese día abandonar el Consejo antes del final de su mandato.
Afirmó que el Consejo estaba monopolizado por un grupo de Estados que lo utilizan para sus objetivos a corto plazo.
“Estos Estados durante muchos años han estado involucrados directamente en violaciones flagrantes y masivas de los derechos humanos, o han sido cómplices de esas violaciones”, dijo, hablando a través de un intérprete.
“A pesar de ser miembros del Consejo, no están dispuestos a sacrificar sus intereses políticos y económicos a corto plazo en favor de una verdadera cooperación y la estabilización de la situación de los derechos humanos en determinados países”.
'Precedente peligroso': China
China estuvo entre los países que votaron en contra de la resolución. El embajador ZHANG Jun temía que cualquier movimiento precipitado en la Asamblea General fuera como “echar leña al fuego”, ya que agravaría las divisiones, intensificaría el conflicto y pondría en peligro los esfuerzos de paz.
“Tratar a los miembros del Consejo de Derechos Humanos de tal manera sentará un nuevo precedente peligroso, intensificará aún más la confrontación en el campo de los derechos humanos, lo que tendrá un mayor impacto en el sistema de gobierno de la ONU y producirá graves consecuencias”, dijo.
UE elogia 'decisión rara'
Para la Unión Europea (UE), la escala y la gravedad de las violaciones de Rusia en Ucrania y de la integridad territorial y la soberanía del país han requerido una respuesta internacional fuerte y unida.
“La rara decisión que esta Asamblea ha tomado hoy envía una fuerte señal de responsabilidad y, con suerte, ayudará a prevenir y desalentar más violaciones de los derechos humanos”, dijo el Embajador Olaf Skoog, jefe de la delegación de la UE.
Un paso en la dirección correcta: EE.UU.
Estados Unidos fue el último país en hablar durante la reunión de un día.
La embajadora Linda Thomas-Greenfield describió la adopción de la resolución como “un momento importante e histórico”. No se trata solo de la rendición de cuentas de Rusia, dijo, sino también de apoyar al pueblo de Ucrania.
“Hoy, la comunidad internacional dio un paso colectivo en la dirección correcta. Nos aseguramos de que un violador persistente y atroz de los derechos humanos no pueda ocupar una posición de liderazgo en materia de derechos humanos en la ONU”, dijo la Sra. Thomas-Greenfield.
“Sigamos responsabilizando a Rusia por esta guerra no provocada, injusta e inconcebible, y hagamos todo lo que esté a nuestro alcance para apoyar al pueblo de Ucrania”.
