Los acontecimientos recientes en Palestina e Israel han subrayado trágicamente de nuevo la necesidad crítica de una paz justa en la región, tanto para los palestinos como para los israelíes, ha dicho el secretario general interino del Consejo Mundial de Iglesias, el reverendo Ioan Sauca.
“El Consejo Mundial de Iglesias pide una investigación internacional independiente sobre el asesinato de la periodista palestino-estadounidense Shireen Abu Akleh el 11 de mayo, dadas las graves implicaciones de este evento”, dijo.
“Los responsables de la muerte de Abu Akleh deben rendir cuentas con todo el peso de la ley”.
Nacido en Jerusalén en 1971, Abu Akleh, que era cristiano, inicialmente estudió arquitectura antes de cambiarse al periodismo en la Universidad de Yarmouk en Jordania, según Al Jazeera.
https://www.aljazeera.com/news/2022/5/11/al-jazeeras-shireen-abu-akleh
Sauca, por su parte, también instó al presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, a abordar este tema con los funcionarios israelíes durante su próxima visita a Israel en junio de 2022, para promover la rendición de cuentas y evitar que tales violaciones ocurran en el futuro.
“No menos de 86 periodistas palestinos han sido asesinados desde 1967, año en que Israel ocupó Cisjordania y Gaza, y 50 de ellos han sido asesinados desde 2000”, dijo Sauca.
“La Sra. Abu Akleh había informado sobre eventos en Palestina e Israel desde 1997 y se había ganado el respeto de los espectadores de todo el mundo”.
El asesinato causó conmoción y dolor entre muchos en todo el mundo que la admiraban, señaló Sauca.
“A ellos les transmitimos nuestras más sinceras condolencias y oraciones, así como a su familia inmediata”, dijo.
TRIBUNAL DE ISRAEL
“Mientras tanto, el 4 de mayo, el Tribunal Superior de Israel desestimó una apelación de los residentes palestinos de Masafer Yatta, en la parte sur de Cisjordania, que permitía al gobierno expulsar a los residentes de una gran área que había sido declarada zona de tiro del ejército”.
Sauca dijo que esta decisión amenaza con el traslado forzoso de hasta 1,200 palestinos de sus hogares en la zona, en la que han vivido durante décadas.
“El 11 de mayo, la Administración Civil de Israel demolió 19 estructuras en Masafer Yatta, la primera demolición de este tipo desde la decisión del Tribunal Superior”, señaló Sauca.
“Nueve de las estructuras eran casas familiares, y el resto se usaba para almacenamiento y alojamiento de ovejas”.
El derecho internacional prohíbe que una potencia ocupante transfiera por la fuerza a miembros de una población ocupada de sus comunidades existentes en contra de su voluntad, señaló Sauca.
“El Consejo Mundial de Iglesias pide al gobierno y las autoridades de Israel, y a todas las personas de buena voluntad, que tomen medidas para detener el desplazamiento forzado de los palestinos de sus tierras y hogares en Masafer Yatta”,
El CMI también pidió las demoliciones y los desalojos, que se elimine en lugar de la población indígena de la zona”, dijo Sauca. “La injusticia nunca puede ser la base para una paz segura”.
