Muchos fumadores comienzan el día con solo un cigarrillo y una taza de café. Y resulta que esta combinación no es accidental. Los investigadores han encontrado que los químicos en los granos de café reducen los antojos de nicotina.
En un nuevo estudio, expertos de la Universidad de Florida encontraron dos sustancias en el café que afectan los receptores de nicotina en el cerebro. Para aquellos que fuman, estos receptores pueden ser especialmente sensibles por la mañana.
Los científicos han estudiado células que imitan uno de los receptores nicotínicos humanos. A estas celdas les aplicaron una solución de café tostado oscuro. Resultó que el compuesto químico orgánico que forma parte del café ayuda a restaurar la disfunción de los receptores de nicotina, razón por la cual una persona desarrolla ansias de nicotina.
Los datos de este estudio llevan a los expertos a creer que uno de los compuestos del café, el n-MP, ayuda a reducir la necesidad de nicotina por la mañana.
