Por Salvatore Cernuzio
“Hay agua por todas partes… represas, caminos, casas, infraestructura; todo destruido.”
El cardenal Joseph Coutts habla de su Pakistán, puesto de rodillas tras dos meses de fuertes inundaciones que han causado hasta ahora unas 1,130 muertes. Más de 380 de las víctimas, según las últimas cifras, son niños.
Una catástrofe natural
Hablando a Vatican News mientras estaba en Roma para la reunión del Papa con los cardenales de todo el mundo sobre la Reforma de la Curia, el cardenal Coutts reflexionó sobre el desastre natural que ha azotado a su país, donde las lluvias monzónicas y las inundaciones han afectado a 33 millones de pakistaníes y dañado a más de un millones de hogares. “Son los de los pueblos”, dice Coutts con una sonrisa amarga: “Como siempre, son los pobres los que pagan el precio.
De la montaña al mar
“No hemos tenido tanta lluvia como esta en los últimos 30 años”, dice Coutts, y continúa diciendo que “Pakistán es un país grande, de unos 1500-1600 km de longitud” y que “en el norte, hay muy altas montañas, K2 es la segunda montaña más alta del mundo.”
La lluvia ha llegado a esas montañas, explica, y el agua se ha desbordado hasta el mar, recorriendo unos 1,700 kilómetros con una fuerza increíble y provocando una “destrucción sin precedentes”.
Gobierno, ejército y Caritas en primera línea
El cardenal Coutts recuerda las inundaciones de agosto de 2010, que inundaron casi una quinta parte de toda la nación. “Francia, Italia, Alemania, todos han ayudado”, dice, “pero la situación ahora es mucho peor”.
Los pobres, agrega, siempre son los más afectados por el desastre: “Tienen casas con estructuras débiles, y el lodo y el agua destruyen todo y son muy peligrosos”.
El apoyo del Papa
El Cardenal Coutts describe las palabras del Papa Francisco durante el Ángelus el domingo pasado como un consuelo:
“El Santo Padre está informado de todo”, dice el Cardenal, “en la reunión en el Aula Nueva del Sínodo, nos saludamos y dije: '¡Pakistán!' Y me dijo: 'Ah, Pakistán. ¿Como estas ahora?' Cuando regrese, les diré a todos que el Papa está cerca de nosotros”.