Viena, 22 de agosto de 2024 – Crímenes de odio religioso – Con motivo del Día Internacional en Conmemoración de las Víctimas de Actos de Violencia Basados en la Religión o las Creencias, se presta especial atención al creciente número de crímenes de odio en la región de la OSCE. Esta cuestión fue enfatizada en un Declaración de los Representantes Personales del Presidente en Ejercicio de la OSCE, destacando la acción inmediata requerida para abordar la creciente intolerancia y discriminación religiosa.
En su mordaz mensaje, los representantes expresaron “profunda preocupación por el alarmante nivel de crímenes de odio y actos de violencia basados en la religión o las creencias en toda la región de la OSCE”. Esta afirmación no carece de fundamento. La declaración destacó un preocupante aumento de la intolerancia hacia los musulmanes y señaló que “el elevado y creciente número de incidentes denunciados de intolerancia, violencia y discriminación contra los musulmanes” es un testimonio de las raíces profundamente arraigadas del odio antimusulmán exacerbado por la xenofobia en varios países.
Desde la serie de ataques terroristas de Hamás en octubre de 2023, ha habido un aumento de los sentimientos antisemitas. Las repercusiones de estos incidentes, combinadas con las persistentes tensiones en el Medio Oriente, han infundido una sensación de miedo entre las comunidades que residen en varios OSCE naciones. Los representantes señalaron que estas condiciones han obligado a las personas a “ocultar su identidad judía en público,” un claro indicador de las amenazas actuales a la libertad y la seguridad personales.
Es evidente que los crímenes de odio religioso no se limitan a ningún grupo. “Los actos de intolerancia contra los cristianos y los miembros de otras religiones o creencias continúan sin cesar,”, afirma el comunicado, enfatizando la conexión entre estas acciones y el nacionalismo extremo, el racismo y los prejuicios. Estas intersecciones presentan peligros para diversos grupos sociales, como las mujeres, los inmigrantes y las comunidades romaní y sinti.
Un contribuyente importante a esta preocupante tendencia de crímenes de odio religioso es el papel de las redes sociales. Los representantes advirtieron que las plataformas de redes sociales son fundamentales para “promover y amplificar estos actos y expresiones de intolerancia y xenofobia”, a menudo incitando a la violencia mediante la difusión de información falsa. Hicieron hincapié en que, si bien la libertad de expresión es fundamental para la democracia, no debería servir como escudo para el odio desenfrenado que apunta al bienestar físico y emocional de las personas.
Las consecuencias de la violencia desenfrenada basada en religión o creencia se extienden más allá de las amenazas físicas inmediatas. Estos actos”arriesgarnos a la erosión de nuestros valores y principios democráticos básicos,”presentando una amenaza a largo plazo para la cohesión social, la coexistencia pacífica y la seguridad social.
En sus observaciones finales, los representantes de la OSCE hicieron un rotundo llamamiento a la acción. Alentaron a los Estados participantes a intensificar sus esfuerzos para salvaguardar la libertad de religión y de creencias, instando a la implementación de “medidas integrales que permitan la denuncia, el registro y el enjuiciamiento efectivos de los delitos de odio.Además, enfatizaron la necesidad de medidas legislativas y coercitivas junto con el apoyo adecuado a las víctimas, cuando sufren delitos de odio religioso.
El comunicado subrayó que “la libertad de religión o de creencias se reconoce específicamente como un aspecto integral del concepto integral de seguridad de la OSCE,” reforzando su papel vital en la lucha contra la discriminación y los prejuicios. Los representantes expresaron su disposición a ayudar a los Estados participantes con la Oficina de Instituciones Democráticas y Derechos humanos (OIDDH) para fomentar el respeto a la libertad de pensamiento, conciencia, religión o creencias.
El llamamiento conjunto fue secundado por Rabino Andrew Baker, Embajador Evren Dağdelen Akgüny Dra. Regina Polak, cada uno de los cuales representa un enfoque en la lucha contra diversas facetas de la intolerancia y la discriminación. Su postura unificada sirve como un recordatorio crucial de los esfuerzos en curso necesarios para garantizar un futuro seguro e inclusivo para todas las religiones y creencias dentro de la región de la OSCE.