El director general de la aerolínea irlandesa de bajo coste Ryanair, Michael O'Leary, ha recibido una prima de más de 100 millones de euros. Será una de las mayores primas en la historia corporativa europea.
Una de las condiciones para el pago de la bonificación es el aumento del precio de las acciones de la compañía. El precio de las acciones de la aerolínea ha superado los 21 € y se ha mantenido por encima de ese nivel durante 28 días desde el 2 de mayo. Sin embargo, aún no se ha cumplido otra condición: O'Leary debe permanecer al frente de la compañía hasta julio de 2028. Ocupa el cargo desde 1994.
El plan de bonificación ofrece una opción de compra de 10 millones de acciones de Ryanair a un precio de 11.1 € cada una, significativamente por debajo del valor de mercado actual de 23.7 €. De concretarse esta operación, O'Leary añadirá más de 100 millones de euros a su fortuna. A los precios actuales, el valor del paquete de 44 millones de acciones que ya posee supera los 1 millones de euros.
Las condiciones para esta bonificación fueron establecidas por los accionistas de Ryanair ya en 2019, e incluso entonces casi la mitad de ellos se manifestaron en contra de una remuneración tan elevada.
Muchos inversores y activistas critican estas enormes bonificaciones para los directivos de las grandes corporaciones. Luke Hildyard, director del High Pay Centre, que lucha contra la remuneración excesiva de los líderes corporativos, afirmó que esta bonificación para el ya multimillonario O'Leary es excesiva, moralmente cuestionable y prácticamente ineficaz.
Según datos del High Pay Centre, recientemente la remuneración de los CEO de las principales empresas británicas ha estado creciendo más rápido que la de sus colegas estadounidenses.
Fotografía ilustrativa de Marc Linder: https://www.pexels.com/photo/rynair-commercial-airplane-731281/