Esta cifra representa un aumento del 25% en comparación con 2023, lo que marca el tercer año consecutivo en que aumentan las violaciones. 22,495 violaciones se cometieron contra los propios niños, mientras que el resto se dirigió contra infraestructuras como escuelas y ayuda humanitaria destinada y utilizada por niños.
“Los gritos de 22.495 niños inocentes que deberían estar aprendiendo a leer o jugar a la pelota, pero que en cambio se han visto obligados a aprender a sobrevivir a los disparos y los bombardeos, deberían mantenernos a todos despiertos por la noche”, dijo el Representante Especial del Secretario General para Los niños y los conflictos armadosVirginia Gamba.
El informe sólo detalla las violaciones que las Naciones Unidas pudieron verificar independientemente, lo que significa que el número real de violaciones graves y de niños afectados probablemente sea mucho mayor.
“Los niños no deberían ser víctimas de la guerra”
El informe denuncia el aumento de los ataques ciegos –en particular la guerra urbana–, además de no tomar en cuenta los acuerdos de paz y la profundización de las crisis humanitarias en el mundo.
“A los niños que viven en medio de las hostilidades se les está arrebatando su infancia… Cuando permitimos que esto suceda, no solo los protegemos, sino que les quitamos la oportunidad de crecer con total seguridad, ir a la escuela y vivir una vida con dignidad y esperanza”, afirmó Gamba.
Además del aumento mayor, el número de niños sometidos a diversas violaciones graves aumentó un 17%.
El mayor número de violaciones, 8,554, se produjeron en Israel y en los territorios palestinos ocupados, más del doble que en la República Democrática del Congo (RDC), que les siguió.
Los gobiernos ignoran “obviamente” el derecho internacional
El informe señaló que si bien los actores no estatales desempeñaron un papel de gran importancia en las violaciones contra niños individuales, los actores gubernamentales fueron las principales fuerzas responsables del asesinato y la mutilación de niños, de atacar escuelas y hospitales y de negar el acceso humanitario.
“En lugar de reconocer la protección especial otorgada a los niños, los gobiernos y los grupos armados de todo el mundo ignoran claramente el derecho internacional que define a un niño como cualquier persona menor de 18 años”, dijo Gamba.
El informe enumera ocho países cuyas fuerzas gubernamentales han violado el derecho internacional y cometido graves violaciones contra los niños: República Democrática del Congo, Israel, Myanmar, Somalia, Sudán del Sur, Sudán, Siria y Rusia.
'Un despertador'
En 2024, 16,482 niños anteriormente vinculados a fuerzas o grupos armados recibieron protección o apoyo para su reintegración, pero el número de violaciones contra los niños sigue siendo increíblemente alto.
El Secretario General ha pedido a todos los Estados Miembros que cumplan con sus obligaciones en virtud del derecho internacional confirmando los derechos y la protección especial de los niños y ampliando al mismo tiempo los servicios para tratar a los niños víctimas de conflictos.
La Sra. Gamba reiteró este llamamiento, diciendo que el aumento de violaciones graves debería ser un “despertar” y recordar a la comunidad internacional que la indiferencia ante tales violaciones no traerá la paz.
Nos enfrentamos a una disyuntiva que define quiénes somos: preocuparnos o distraernos… Todos compartimos el deber de actuar —con urgencia y determinación— para poner fin a este sufrimiento. No mañana. No un día. Hoy mismo —concluyó.
publicado originalmente en Almouwatin.com