El Ministerio de Transporte de Rumanía ha aprobado las especificaciones técnicas y económicas de un contrato en virtud del cual el gobierno pagará 973 millones de euros (sin IVA) por 12 trenes propulsados por hidrógeno, cada uno con 160 asientos, informó Economica.net. El contrato, que se ejecuta a través de la Autoridad de Reforma Ferroviaria, incluirá, además de los trenes, su mantenimiento “a largo plazo”. Los trenes se utilizarán para atender rutas que aún no están electrificadas: entre la Estación Central y el Aeropuerto de Bucarest (cada media hora), Bucarest – Pitesti (cada hora) y otras.
El proyecto de inversión se financia con subvenciones externas, a través del Programa Nacional de Reconstrucción y Sostenibilidad PNRR, y con cargo al presupuesto del Estado, a través del presupuesto del Ministerio de Transporte e Infraestructura. La sustitución de los trenes diésel por trenes que utilizan pilas de combustible de hidrógeno reduce la contaminación del transporte en el equivalente a más de 18,348 toneladas de CO2 al año y 306 toneladas de NOx/año (las estimaciones preliminares cuestan actualmente 600,000 € al año), lo que ayuda a alcanzar los objetivos marcados por la Unión Europea. y estrategias nacionales para lograr un efecto de contaminación neta cero en 2050, explicó el secretario de Estado Ionel Scriosteanu.
Recordemos que la mayor empresa ferroviaria japonesa “JR East” presentó en febrero el tren “Hibari”, propulsado por hidrógeno. Se mostró a los periodistas en una base experimental en la ciudad de Kawasaki, que se encuentra cerca de Tokio, informó la agencia de noticias Kyodo. El motor genera electricidad, que se almacena en baterías de alta capacidad mediante la combinación química de hidrógeno de un tanque con oxígeno atmosférico. Solo se libera a la atmósfera vapor de agua respetuoso con el medio ambiente. Trenes de este tipo pueden recorrer 140 kilómetros con una sola carga de hidrógeno. Se utilizarán en zonas rurales donde todavía se utilizan locomotoras diésel. Cada año, los trenes JR East emiten alrededor de 2.5 millones de toneladas de dióxido de carbono. Con la introducción de nuevas tecnologías, incluidos los motores de hidrógeno ecológicos, se espera que esta cantidad se reduzca a la mitad para 2030. Para 2050, JR East planea reducir a cero