En Azerbaiyán, un nuevo proyecto piloto muestra que cuando la atención primaria de salud prioriza la capacitación de los trabajadores de la salud y el empoderamiento de las comunidades locales para que se hagan cargo de su salud, el propio sistema nacional de salud puede volverse más fuerte y resistente.
Muchas personas han tenido dificultades para acceder a los servicios de salud en áreas remotas y rurales del país debido a la insuficiencia de los servicios e instalaciones de atención primaria de la salud. El nuevo proyecto PROACT-Care, implementado por la OMS a través de Universal Health Coverage Partnership (UHC Partnership), está demostrando que las cosas pueden cambiar.
Seferov Semed es el representante del gobierno local de la ciudad de Goyler en la región montañosa de Shamakhi. Recientemente asistió a una ceremonia de inauguración de la OMS para 3 clínicas móviles de atención primaria de la salud, que ahora visitan estas áreas remotas y brindan servicios de salud esenciales.
“¿Qué puede hacer la atención primaria de salud por Shamakhi? Se revisará la salud de las personas, se podrá acceder fácilmente a los servicios de salud y se informará a las personas sobre los problemas de salud”, dice Seferov.
Las clínicas móviles son vehículos que se desplazan de pueblo en pueblo transportando equipo médico, suministros y trabajadores sanitarios de la comunidad. Aseguran que la atención de la salud se acerque a quienes no pueden viajar a los establecimientos de salud que están lejos.
Apoyo a los trabajadores de la salud en las zonas rurales
Ubicada a unos 100 km al oeste de Bakú, la región rural de Shamakhi alberga a unas 106 000 personas cuyo punto de entrada al sistema de salud son sus instalaciones de atención primaria de salud.
Al centrarse en desarrollar la capacidad de los trabajadores locales de atención primaria de la salud, el proyecto garantiza que las comunidades rurales no se queden atrás en los esfuerzos de vacunación y tratamiento de la COVID-19 en el país. Los resultados y las lecciones aprendidas del proyecto piloto servirán como base para la implementación a nivel nacional de un sistema de atención primaria de la salud sólido y resiliente.
“Tenemos una maravillosa oportunidad de fortalecer la atención primaria de salud en Azerbaiyán para abordar las necesidades de la mayoría de las personas”, dijo el Dr. Hande Harmanci, Representante de la OMS en Azerbaiyán. “Esperamos que muy pronto podamos demostrar un modelo útil, práctico y rentable para el país en colaboración con nuestras contrapartes nacionales”.
A través del proyecto, la OMS ha estado capacitando a trabajadores de la salud en todos los niveles e involucrando a los miembros de la comunidad en temas importantes de los servicios de salud para brindar mejores servicios de atención primaria de la salud, incluida la prevención y el manejo de enfermedades crónicas.
Entender el contexto local
El sistema de salud de Azerbaiyán se basa en el modelo “semashko”, donde los policlínicos brindan atención primaria y servicios especializados ambulatorios. Otros establecimientos de atención primaria de la salud son las clínicas médicas de las aldeas y las clínicas de medicina general de las aldeas o los pueblos.
Actualmente, los principales desafíos para el sistema de salud son la infraestructura deficiente, la ausencia de equipo médico, la escasez de trabajadores de la salud y la falta de capacitación, todos factores que limitan el alcance y la calidad de los servicios de atención primaria de salud.
La escasez de médicos en las áreas rurales ha empeorado debido a una combinación de bajos salarios y médicos existentes que se jubilan y no son reemplazados. Solo el 8% de todos los establecimientos de atención primaria de la salud tienen un suministro central de agua. Como resultado, las instalaciones y los servicios de atención primaria de la salud en las zonas rurales no funcionan o la comunidad los utiliza muy poco.
Los proyectos implementados por la OMS, como PROACT-Care, continúan abordando estos problemas al enfatizar la resiliencia y el desarrollo de capacidades.
La Alianza UHC es una de las mayores iniciativas de la OMS sobre cooperación internacional para la cobertura sanitaria universal y la atención primaria de salud. Está financiado por Bélgica; Canadá; la Unión Europea; Ministerio de Francia para Europa y Relaciones Exteriores; Alemania; Ayuda Irlandesa; el Ministerio de Salud, Trabajo y Bienestar de Japón; el Gran Ducado de Luxemburgo; y por la Oficina de Relaciones Exteriores, Commonwealth y Desarrollo del Reino Unido.
