A pesar de la feroz resistencia, las fuerzas armadas rusas continúan avanzando poco a poco en la región oriental de Donbas en Ucrania.
Mientras tanto, el presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, condenó a Moscú por los ataques a una planta química en la ciudad oriental de Severodonetsk. Se ha advertido a los habitantes de la ciudad que no abandonen los refugios antiaéreos y se les ha instado a preparar máscaras para protegerse contra los gases tóxicos.
En otras partes de la región de Donbas, el sufrimiento humano continúa también.
En Slovyansk, los residentes están desesperados después de que al menos tres personas murieron y seis resultaron heridas en un ataque con misiles rusos en esta ciudad del este. “Me siento devastado. De dónde salió todo esto y hasta cuándo”, dijo una mujer llorando en su apartamento destruido. “Estábamos viviendo muy bien, tranquilos, tranquilos. ¿Y ahora qué es esto? ella se pregunta. “¿Dónde estoy con todas estas cosas ahora?”
Otra mujer está de acuerdo entre lágrimas. “Está bien, podemos lidiar con toda esta destrucción. Pero la vida, la vida humana, la vida humana, ¿cómo?
Pero el número de muertos sigue aumentando a medida que las fuerzas rusas continúan adentrándose en el corazón industrial de Ucrania después de enfrentar derrotas iniciales en otras partes del país.
En respuesta, Estados Unidos se apresura a enviar sistemas avanzados de artillería de cohetes. El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, dijo que el objetivo era ayudar a Ucrania a defenderse.
Acuerdo de no apuntar al territorio ruso
Sin embargo, el presidente Biden dijo anteriormente que Washington no estaba alentando a Ucrania a atacar más allá de sus fronteras. “No vamos a enviar a Ucrania sistemas de cohetes que ataquen a Rusia”, dijo Biden a los periodistas.
Pero Rusia no está convencida. En otra señal de las crecientes tensiones Este-Oeste, las fuerzas nucleares de Rusia supuestamente comenzaron a realizar ejercicios en la provincia de Ivanovo, al noreste de Moscú.
La agencia de noticias rusa Interfax citó al Ministerio de Defensa ruso diciendo el miércoles que unos 1,000 militares están realizando intensas maniobras.
El ministerio dijo que utilizan más de 100 vehículos, incluidos los lanzadores de misiles balísticos intercontinentales Yars.
Los simulacros se llevan a cabo mientras la OTAN considera una oferta de Suecia y Finlandia para unirse a la alianza militar occidental.
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