Estas estructuras, esparcidas por todo Irán, funcionaban como refrigeradores primitivos.
En las extensiones áridas del desierto persa, se descubrió una tecnología antigua asombrosa e ingeniosa, conocida como yakhchāl, que en persa significa "pozo de hielo". Yakhchāl (persa: کلکر; yakh que significa "hielo" y chāl que significa "pozo") es un tipo antiguo de enfriador evaporativo. Hacia el año 400 a. C., los ingenieros persas dominaban la técnica de utilizar yakhchāl para crear hielo en invierno y almacenarlo en verano en el desierto.
Revela el sofisticado enfoque de nuestros antepasados en la producción de hielo y se remonta al año 400 a.C. Estas estructuras, esparcidas por todo Irán, funcionaban como refrigeradores primitivos, utilizando un sistema de enfriamiento diseñado para almacenar hielo durante todo el año. Los yates tenían una distintiva forma de cúpula que albergaba una enorme zona de almacenamiento subterráneo. Construidos con materiales gruesos y resistentes al calor, los yates utilizaban un sistema de refrigeración por evaporación elevado.
Trabajando en armonía con el clima natural, el aire frío ingresa a través de las entradas en la base, mientras que el diseño cónico ayuda a expulsar el calor restante a través de las aberturas en la parte superior. El proceso de producción de hielo comenzó con lagos poco profundos que se llenaban cada noche con canales de agua dulce. Protegidos de los rayos del sol por muros que les daban sombra, los lagos se congelaban durante las noches de invierno.
Luego, el hielo recolectado se transfirió a un yahchal hecho con materiales locales como adobe, arcilla, clara de huevo, piel de cabra, jugo de limón y mortero impermeable. Estas notables estructuras desempeñaron un papel vital en la conservación de alimentos, bebidas y posiblemente en el enfriamiento de los edificios durante los calurosos meses de verano. Hoy en día, quedan 129 yakhchals como un recordatorio histórico del antiguo ingenio persa.